En las distintas soluciones con desinfectantes para la limpieza de un ambiente de trabajo, deben de ser bien manejadas y gestionadas por especialistas de la limpieza profunda. Cada producto de este tipo, posee sus características propias con reacciones específicas, que deben ser aplicadas, dependiendo de la estructura del edificio y toda la maquinaria que se encuentra en ese lugar. Además, es esencial tomar en cuenta al personal, para que no les afecte, por una inadecuada planeación y ejecución de la desinfección de oficinas.
Existen distintas clases de soluciones, como los bóricos, acéticos, cloruros, halógenos y los que están hechos a base de cítricos, que son ideales para eliminar bacterias, por sus propiedades antisépticas. A final de cuentas, hay muchos tipos, que se pueden enumerar a continuación.
Los formoles y formaldehídos, son excelentes bactericidas de muy amplio espectro, ideales para sanitizar áreas con excrementos y demás deposiciones, que puedan resultar en un problema para los trabajadores de dichas áreas.
Por otro lado, los fenoles y cresoles combinados con resinas y detergentes, hacen la perfecta combinación para la sanitización de empresas y naves industriales, con problemas de suciedad constante en superficies. Otros similares, son los fenoles sintéticos, que resultan además de bactericidas, excelentes fungicidas y virucidas, con capacidad de desinfectar cubiertas sanitarias (alfombras) y otros objetos similares que estén en zonas sensibles de infección, como granjas. Los ejemplos más claros de estos elementos sintéticos, son el difenol, ortofenifenol y el clorosilenol.
El glutaraldehido, quizás es el sanitizante químico más eficaz, por sus propiedades anti fúngicas y anti bacteriológicas. Hongos y bacterias no sobreviven a la correcta aplicación de este elemento, a través de un servicio de sanitización profesional; inclusive, algunos virus son extremadamente susceptibles ante esta clase de soluciones. Indudablemente, son potentes microbicidas, siendo mucho más fuertes con pH alcalinos.
Solo hay que estar atentos a ciertos factores que se pueden dar con estos desinfectantes químicos. Por ejemplo, los cresoles y formaldehídos, son muy irritantes para la piel y mucosas en general, por lo que su manipulación debe ser de forma muy cuidadosa.
Quizás lo mejor sea acudir a servicios profesionales de sanitización, para ver cuáles son las mejores opciones para limpiar y desinfectar en una nave industrial o complejo de oficinas, tratando de que se incluyan métodos y productos que no sean irritantes o corrosivos para las personas que laboran en esos lugares.
Para lograr una desinfección eficaz en cuartos de ganado y otros animales de granja, es fundamental que los desechos como estiércol, se remojen con agua, para posteriormente desecharlo fuera del rastro o áreas agrícolas. Después, se podrá pasar a la segunda fase, que es el uso de agua a chorro, para erradicación completa de esos desechos, poniendo especial atención en recovecos donde pudiera acumularse suciedad y focos de infección. Paredes, comederos, pisos y techos, deben desinfectarse con todas las medidas posibles, usando agua caliente y productos especiales, para asegurar una desinfección absoluta.
Para limpiar y sanitizar equipos, maquinarias y superficies sin ningún riesgo, hay que estar al tanto de cuál producto químico es el idóneo, y sopesar las consecuencias que pudieran tener los componentes usados en personas y animales. En cada país, hay regulaciones sanitarias para la limpieza profunda industrial dentro del sector agrario y alimentario; hay que checar los etiquetados.
Muchas veces, la efectividad microbiana disminuye, porque erróneamente se aplican directamente en excrementos y demás desechos. Lo correcto es ir en orden, y lo primero es limpiar normal o mecánicamente todas esas secreciones y excreciones, para ahora sí, pasar a la sanitización industrial por medio de desinfectantes, sistemas de nebulización u otros aparatos similares. Tampoco hay que mezclar los agentes porque podría ser peligroso. Lo mejor es acudir a servicios profesionales, para que hagan el mejor trabajo posible.